Vaya año! qué emocionante! cuántos sentimientos! cuántos viajes! cuántas alegrías!
Viajé a Bruselas y Copenague, volví a Londres, me reencontré con Marine y me fui de mochilero, acabé la carrera, me lancé a la piscina, celebré mi cumpleaños en Dundee, me vine a vivir a Londres, me independicé económicamente...
Sin duda, los mejores momentos del año fueron aquella tarde de septiembre en la que por fin salió mi última nota...