la palabra escrita es lo único que queda de verdad cuando todo lo demás se ha ido

la palabra escrita es lo único que queda de verdad cuando todo lo demás se ha ido

martes, 21 de septiembre de 2021

de Dundee a Nebraska en 10 años

Este mes mes ha hecho 10 años que empezó mi aventura erasmus en Dundee y en pocos días empezaré un nuevo máster ¡y ya irán 3! ¿Qué ha pasado en estos 10 años?

Siento que fue en aquellas frías y ventosas tierras donde empezó mi vocación viajera e internacionalista; se supone que se dice "en ambientes internacionales" pero a mí me gusta más así. Empecé a conocer a gente de todo el mundo mientras iba mejorando mi inglés y ya en pascua hice mi primer viaje solo como mochilero por las Irlandas.

Ya el siguiente verano, y con la carrera [casi] acabada, me hice un segundo súper viaje: Londres-Carcassonne y de ahí a Almería haciendo auto-stop, couchsurffing, visitando a amigos, haciendo nuevos... 11 meses más tarde otro por la península+Menorca y de allí a Estambul. Esta vez viendo a los viajeros desde el otro lado de una recepción en un hostel, pero siguiendo con ese ambiente multicultural y conociendo a gente todo el rato... 2 meses más tarde decidí volverme a colgar la mochila y conocer todos esos lugares por la península de Anatolia que mis guests comentaban. De allí ya pasé a los Balcanes y llegué a Madrid: aparcando el mochilerismo, soplando las velas de mi 26 cumpleaños e intentando abrazar la vida adulta tras haber vivido el mejor año de mi vida, lástima (o no) que la vida adulta tardase varios años en abrazarme a mí...

Estando ya en Madrid tuve una eterna sucesión de trabajos precarios y masters; con esto de saber inglés y ser simpático, me salieron bastantes trabajos internacionalistas (hostel, Puerta del Sol, vigilante de exámenes de la UE...), y en paralelo iba recibiendo visitas de todo el mundo que había conocido en mis años previos ¡y me gustó tanto la idea de pasear y enseñar Madrid que hasta empecé a currar como guía turístico!

Hasta la primavera de 2019 (bueno, lo de guía nunca lo dejé, pero ahora mi availability es ínfima), que apareció Nebraska y me ofreció la estabilidad laboral que aún no había encontrado desde que me licencié. Y ahora trabajo del otro lado de cuando estaba de erasmus; en vez de ser el alumno perdido, soy el que lo ubica, en vez de contar problemas, doy soluciones, en vez de ahogarme con el inglés, les cambio al inglés para que me entiendan… me veo tan reflejado en todos ellos. (...) Pero ahora quiero más; (...) soy sociólogo y tengo mucho que enseñar. Explicarles nuestra historia, nuestro sistema político, nuestra actualidad...

Por lo que empezaré un 3er máster ¡estaré 12hrs al día en la Universidad! para adquirir las herramientas que me faltan y seguir creciendo profesionalmente: si la Sociología no llega a mi vida, está claro que yo la llevaré a Nebraska ¡Y que viva el internacionalismo, la Sociología y la Simpatía!

Además de que trabajar en educación, igual que Sonia, y compartir esas enormes y maravillosas vacaciones, está de puta madre para seguir colgándose la mochila una vez al año.⛺👫😄

2 comentarios:

  1. Y nunca, nunca, dejarás de crecer, porque la mochila está en la cabeza y no en la espalda.
    Es el ADN querido

    ResponderEliminar
  2. Qué bonita entrada. Y lo "hombrote" que se te ve, más guapo y más sabio (con el permiso del Lucas de 23)
    Sigue viajando, querido amigo :)

    ResponderEliminar